Cuarenta y ocho horas dan para mucho. Son las que le han bastado a
F.González en su ¿”discreta”? visita a Venezuela. En ese corto espacio de
tiempo el sr. González se ha informado exhaustivamente de todo lo que pasa en
el país caribeño, al que designa reino de
la arbitrariedad. Tendremos que suponer que, desde que anunció su visita,
tanto los servicios diplomáticos de nuestro Ministerio de AA.EE, como los
servicios de espionaje y contraespionaje, le facilitarían un gran dosier de los
asuntos a tratar. No tuvo el mismo comportamiento el sr. García Margallo cuando
no hace mucho el expresidente Rodríguez Zapatero y el sr. Moratino
visitaron la República de Cuba. A éstos,
sin razones convincentes, se les acuso de lobbies de no se sabe qué intereses…
Que sepamos, el sr. Zapatero es un político, pues es miembro del Consejo de
Estado, y el sr. González es un “hombre de negocios”. Es un matiz muy
importante que nuestro jefe de la política exterior no ha tenido en cuenta, y,
por otra parte, el sr. González no ha dicho ni una sola palabra en defensa de
su compañero de partido y excolega en la Jefatura del Gobierno….
En esas 48 horas el propio Felipe dice haber cumplido todos los
objetivos de su visita: he visto a las
familias de los presos, a Antº. Ledezma, a Leopoldo Capriles, al ganador del
Ortega y Gasset, Teodoro Petkoff, me he reunido con estudiantes… He tenido
mucha seguridad, yo diría incluso más de la que necesitaba… Pero lo curioso
es que todo lo ha podido hacer en un país que necesita diálogo y reconciliación para restituir la democracia…
Dudo mucho que esa injerencia “semicolonial” en los asuntos políticos y
jurídicos de un País Soberano ayude lo más mínimo a la “reconstrucción del
diálogo y la reconciliación”. No se puede perder de vista que Venezuela está
considerado como un país democrático por los máximos organismos
internacionales, y González, máximo exmandatario de España, aunque hoy sea un
particular por muy importante hombre de negocio que se considere… No sé si su
visita a Venezuela beneficiará a los intereses de las muchas empresas españolas
que invierten en aquél rico país… Actuaciones similares llevadas a cabo por el
gobierno de Aznar respecto de Cuba, nos están cogiendo con el pie cambiado en
las nuevas relaciones político-comerciales de EE.UU con la Isla… Debemos
preguntarnos a quiénes ha beneficiado esa especie de “guerra fría” mantenida
durante más de 50 años con el gobierno revolucionario de Castro. Desde luego no
al pueblo cubano; pero, sí, y mucho, a los ricos exiliados de Miami y a los
intereses semiclandestinos de las grandes compañías estadounidenses.
¿Ha hablado Felipe, no ya con los partidarios del régimen “chavista”, si
quiera con los líderes de la oposición
moderada, como el excandidato presidencial y Gobernador del Estado de Miranda,
Henrique Capriles Radonski, o con Jesús Torrealba, Secretario ejecutivo de la
opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD)? ¡NO! Nuestro “oráculo”, sin
embargo, ha aprovechado el “amplificador” de la Asociación de la Prensa
Madrileña y los “terminales” del “imperio” PRISA, para hablar de “lo suyo”.
Ahora está de moda ir a “los medios” muchos “oraculillos” son su librito bajo
el brazo…
El acto, por cierto, fue convocado, ¡qué casualidad!, para presentar en
España la Asociación de Periodistas Venezolanos, de entre los que sólo cita el
sr. González a Miguel Enrique Otero, director del opositor periódico, El
Nacional, la única prensa libre en papel
que queda en Venezuela, según Felipe. Pero, ¿cómo que puede quedar prensa
libre en un país cuasi dictatorial? Puesto a dejarse llevar por un estado
emocional ultraliberal, igualmente se pudiera haber ensalzado a “El Mercurio”,
de Pinochet…
Pero, seamos comprensivos con nuestro “expresidentísimo”, que ha vuelto
muy triste y preocupado. Me preocupa, dice,
que un país tan rico camine hacia un
proceso de destrucción… ¡No regresaba con el mismo estado de ánimo cuando
volvía de aquél paraíso gobernado, entonces, por su amigo corrupto y corruptor,
Carlos Andrés Pérez!... Con igual derecho que se “malpensó” de la visita de
Zapatero y Moratino, como lobbies de no sé dijo qué intereses, con ese mismo
derecho podemos pensar que no es culpa de Maduro que la visita de González no
haya sido lo discreta que él hubiera deseado, sino de la “oportuna” preparación
de la misma, haciéndola coincidir con la campaña electoral…
Pero nuestro “sabelotodo” en política internacional, vino, no lo olvidemos,
a “hablar de su libro”, sin importarle mucho los “daños colaterales”, que, de
una sola tacada, al comparar la democracia venezolana con otros países del
Este, o al profetizar que los partidos políticos emergentes pueden llevar la
democracia española un modelo italiano
sin italianos…
Pero, como él venía a hablar de lo suyo, ante las preguntas de los
periodistas sobre los acontecimientos, poco importantes para su capacidad
política, como las elecciones Autonómicas y Municipales, o sobre los pactos
entre PSOE y PODEMOS, su respuesta raya el desprecio… Un político tan “maduro”
(¿?) no está para “minucias”, teniendo en cuenta lo que le pagan en otras
“consejerías” y por viajes de asesorías… Reproduciré el párrafo de la
periodista, Cecilia Ballesteros (El País, 12-6-15): “Ante las preguntas sobre
política española, en particular sobre Podemos, González señaló que prefería contestar a Maduro antes que contestar a los
monaguillos, y declinó hablar de política interna porque eso sería darle la
razón a Maduro”. Juzgue el lector si esto es madurez política o “chocheo” del
abuelito porreta que se cree imprescindible…
¡Y eso que no quería hablar! No se conforma con el tiempo que él ha
tenido para hablar y hacer lo que ha querido o podido… Soporta mal que ahora
sean otros los que deban hacerlo. Y esos otros, entre los que me cuento a pesar
de mi edad, similar a la de Felipe, tenemos que decirle que, cuando él, en
1982, llegó a Papa, lo fue de una iglesia, el PSOE, ya fundada casi cien años
antes, y que fue elevado a tan alta dignidad en un cónclave, donde no todos los
votos eran de los suyos (recordar el “voto útil”). Que llegó al “pontificado”
con el solo título de licenciado en derecho, después de haber ejercido como
“laboralista” en la parroquia de Bellavista (Sevilla). Que en su paso Por el
Vaticano de la Moncloa hubo de todo, bueno y malo. Entre sus buenas obras hay
que destacar la terminación de la Catedral de la Almudena en beneficio de los
católicos. Iglesia que ni siquiera el nacionalcatolicismo pudo acabar… Pero,
eso sí, con el dinero de todos, incluidos los no católicos…
En 1996, con las alforjas repletas de un largo gobierno, transitado por el nepotismo, la corrupción y
un cuasi terrorismo de Estado, tuvo que dejar el gobierno. No porque dimitiera,
sino porque otro se lo arrebató por más o menos 300.000 votos… ¡Vamos, que con
una semana más de campaña, como decía ufano, aún hoy podría seguir canonizando
a beatos de su devoción!...
Sin embargo, “santidad”, otros a los que denomina “monaguillos” han
corrido escalafón. Pero eso sí, aparte de por antigüedad, por méritos propios.
Estos acólitos con la edad que, más o menos, usted tenía en los ochenta, tienen
un currículo académico mucho más abultado que el suyo. Pues el que más o el que
menos, disfruta de varias licenciaturas y algún que otro doctorado, sin contar
con el dominio de varios idiomas, algo de lo que han adolecido nuestros Jefes
de Gobierno y muchos Ministros… Pero, ya se encargó de recordarlo en el único
mitin que le dejaron en unos de sus feudos, Extremadura, todo ello debido a los
dones que, generosamente, fue repartiendo en su largo “pontificado”…
Pero, mire su santidad por dónde, la omnipotencia divina, que actúa por
encima de toda obra humana, sea ésta de cura, obispo o Papa, estos monaguillos,
últimos en el escalafón jerárquico, sin cobro alguno de “estipendio”, y sin
tener que sisar del “cepillo”; sólo con el esfuerzo ilusionante de ellos, y con
la “calderilla” recolectada entre centenares de miles de fieles asistentes a
una liturgia laica, celebrada en las plazas y calles, que rodean iglesias y
templos oficiales, han sabido construir desde la nada, o dar cauces a la
indignación provocada por otras “liturgias” oficiales, otras iglesias laicas, a
las que, esperemos, no vuelvan a acudir los “mercaderes”… Estos “monaguillos”
que han olido el vahído húmedo, mezcla de sahumerio residual y de pabilos de
velas apagadas en lúgubres sacristías, tienen todo el derecho del mundo a
ejercer su “sacerdocio”, aunque se equivoquen o algunos caigan, estoy seguro de
ello, en la tentación… ¡Como todos, como tú, y como el mismísimo Papa de Roma…
Por favor, sr. González, déjelos y déjenos tranquilos a los millones de
ciudadanos, que, como el que esto escribe, después de haber sido monaguillos y,
por ello, “pillos”, no nos resignamos a seguir callando y disimulando las
hipócritas “fechorías”, adivinadas en la penumbra de templos y casas
parroquiales… Haga como Benedicto XVI, dedíquese a sus negocios particulares y
prepárese para rendir cuenta de los mismos a su dios… Le prometo que los
fieles, incluidos los suyos, serán generosos y deseosos de descargarle de sus
enormes preocupaciones… Es sospechoso lo nerviosamente preocupados que se
muestran estos “dinosaurios”, “beneficiados” del Templo, cuando éste vibra,
aunque sea por el repicar de sus campanas…
No espere, sr. Gonzáles, que desde el Caribe le tengan que decir… “pero…,
¿por qué no te callas”?... O aquella otra frase, que, sin duda, aún repetirá su
subconsciente: ¡váyase, sr. González!...
Haga caso, pues sería aún peor que tuviera que oír ese grito desde su propia
“bancada”…
Manuel Vega Marín. Madrid, 14 de
Junio, 2015. Blog:
solicitoopinar.blogspot.com.es
Muy bien, señor Manuel Vega Marín. Magnífico artículo. Es usted un gran conocedor de Felipe Gonzalez. El falso socialista.
ResponderEliminarMe alegro que le haya gustado mi artículo. Espero tus comentarios sobre otros. Saludos
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