miércoles, 25 de noviembre de 2020

LA ENSEÑANZA PÚBLICA, GARANTÍA DE IGUALDAD ENTRE CIUDADANOS



   Así como no elegimos de qué vientre nacemos ni en qué lugar venimos al mundo, tampoco podemos escoger qué lengua utilizar para satisfacer nuestras primarias necesidades. Nos vemos obligados, pues, a expresarnos en la lengua de nuestros progenitores, la lengua materna; y, salvo que se haya nacido en el seno de una familia bilingüe o se haya dispuesto de medios para asistir a guarderías bilingües, la gran mayoría de españoles hemos pasado nuestra niñez comunicándonos con las personas de nuestro entorno en la lengua o dialecto común. Aprendemos a hablar antes de pensar o conocer las reglas de la Lógica o de la Gramática, Difícilmente, pues, la sola indicación de una ley podrá, con “inmersión” o sin ella, hacernos comprender mejor las matemáticas o la física, que la lengua materna. Ni siquiera la violencia franquista, ni el más cerril anticatalanismo han sido capaces de hacer desaparecer la lengua catalana. ¿Se puede uno imaginar lo absurdo que sería que una ley europea pretendiera sustituir el alemán o el francés por el “esperanto” en una futura Confederación Europea? Así que “pierdan cuidao” los que, con el engañoso pretexto de que el español está en peligro de extinción, fomentan las bajas emociones de los castellano-parlantes del ¡a por ellos!...

   Una lengua hablada por casi 500 millones de humanos, con variados modismos o matices, no puede verse en riesgo de desaparecer por muchos que sean los escándalos con pitadas y banderas organizados por un insignificante número del, aproximadamente, 8% que en España la utilizan. Intentar desaprovechar la riqueza que nos brindan los varios idiomas hablados en nuestra piel de toro, sólo pone en evidencia el caciquismo cerril e interesado que obnubila aún la mente de muchos fanáticos españolitos...

   Otro bulo que, al grito de libertad, libertad, intenta colar la derechona hispánica es que la LOMLOE acaba con la Enseñanza Concertada. ¡Ójalá fuera así! A lo que más se atreve la nueva ley es suprimir algunos escandalosos privilegios que vienen disfrutando ciertas élites, a las que osan llamar “clase media”, como, p. ej., que con el dinero de todos se pague la enseñanza de sus hijos en centros docentes privados, elegidos a conveniencia, la mayoría de los cuales son de propiedad de la iglesia católica, existentes generalmente en grandes poblaciones o en barrios ricos o semiricos. A este respecto, la ley Wert (LOMCE) vigente, en la programación de la oferta de centros docentes, la Administración, además de tener en consideración los centros públicos y privados/concertados existentes, debía tener también en cuenta la demanda social (art. 109), exigencia omitida por la LOE. No es extraño, pues, que, para garantizar la suficiencia de plazas escolares, satisfaciendo la demanda de los padres, se abriera la posibilidad de construir y gestionar colegios privados concertados sobre suelo público.

   Los intereses que el franquismo consolidó a favor de la Iglesia referidos a este tema, obligó al “constituyente” a tener en cuenta una vez más el atado y bien atado en la elaboración de la Constitución vigente. Como afirma el profesor Pérez Royo, los artículos 16 y 27 y los Acuerdos con la Santa Sede son el “corsé” dentro del cual tiene que moverse el legislador para regular el ejercicio del derecho a la educación. Es un “corsé” con el que la derecha española se encuentra muy cómoda, pero es un “corsé” que asfixia a la izquierda. Cada intento de ésta por relajar la presión del “corsé” es denunciado por la primera como anticonstitucional, como ruptura del “consenso constituyente”, denuncia a la que, como estamos viendo, la Conferencia Episcopal se apunta de manera inmediata (“La Ley Celaá, elDiario.es de 22-11-20). Y es que, con el pretexto de Libertad ideológica y religiosa (art.16) y Libertad de enseñanza (art.27), se pretende colar a hurtadillas otros intereses que tienen más que ver con el mantenimiento de ciertos privilegios y con el mantenimiento del negocio, que un sana preocupación por la bondad de la educación. La Constitución de la República de 1931, respetando todos los anteriores derechos, fue menos diletante y más clara (cfr. arts. 27, 48, 49...). No es de extrañar, por otra parte, la cantidad de leyes educativas existentes, mientras esos “corsés” estén impidiendo la falta de consenso entre todos los partidos políticos representativos y demás grupos de presión...

   El mejor medio de garantizar la igualdad entre ciudadanos libres es la Enseñanza PÚ-BLI-CA... Las desigualdades fácticas con las que nos encontramos desde la cuna y nuestra infantil “dependencia” de nuestros mayores pueden ser corregidas por medio de una enseñanza crítica y a través de la convivencia con las personas de nuestro entorno. Que esto es así, lo viene confirmando el informe que la OCDE emite  sobre el sistema educativo de Finlandia, que, junto con otros países nórdicos, son considerados pioneros, siendo público sus sistemas de enseñanza. En sus escuelas se forman ciudadanos libres, con independencia del nivel económico o de la consideración social de las familias. Si se mantiene en el ámbito de lo privado y fuera de las aulas y de los currículos la religión u otro tipo de creencias no científicas o racionales, todas las libertades están aseguradas y protegidas por la observancia escrupulosa de la libertad de cátedra y la participación activa de todos los sectores implicados en esta transcendental empresa. En los centros de enseñanza financiados exclusivamente con dinero público pueden enseñar y expresar sus ideas libremente todos los profesores, sean creyentes, ateos o laicos, los de derechas o de izquierdas... Los únicos filtros existentes para la admisión de alumnos y de profesores son los requisitos legales y los convenidos por todas las partes en la elaboración de programas y currículos. La pluralidad ideológica, pues, no puede estar mejor garantizada...

   No es ningún secreto especial el alto nivel alcanzado en los sistemas educativos de los países citados, El quid de la cuestión está en la excelente preparación y consideración social de los docentes y en su justa remuneración económica. Aquello de pasas más hambre que un maestro de escuela se sigue dando en España... El exigente sistema de acceso a la docencia y el  subsiguiente control desde la pluralidad y el equipo de colegas, así como el seguimiento individual de los alumnos, dificultan muchísimo el predominio de cualquier ideología y, mucho más la imposición de cualquier forma de adoctrinamiento sectario. Cosa que suele ocurrir en las escuelas privadas, concertadas o no. En estos centros, por más que exista un Consejo escolar, realmente, quien manda, selecciona y contrata a profesores y alumnos, es el propietario, Y, si, como sucede en España, más del 60% de centros concertados es propiedad de distintas órdenes religiosas, el adoctrinamiento está, de alguna sutil manera, asegurado. En esta querido país, además, el erario público paga a los profesores de Religión  escogidos pos los obispos.

   Cuando la derechona manipula con el supuesto derecho constitucional de los padres a elegir colegio para sus hijos al grito de una libertad que no defendieron en el nacionalcatolicismo, lo que de verdad exigen de los demás ciudadanos es que entre todos les financiemos su elección “caprichosa”, que el distrito único de la ley Wert les facilita. Más que de la calidad de la enseñanza, lo que realmente  interesa a esos padres es que sus hijos no se “contaminen” con los alumnos pobres, emigrantes, etc., que son los que se ven obligados por diferentes motivos a abarrotar las aulas de la escuela pública de los barrios obreros o en las deterioradas escuelas de la España “vaciada”, donde no es negocio invertir en enseñanza...

   Estos padres tan preocupados por elegir centro escolar buscando una buena educación para su prole, además del artículo 27 deberían exigir el artículo 39 de la Constitución que establece Protección a la familia y a la infancia, en cuyo punto dos demanda la protección integral de los hijos. En relación con este artículo, la Ley Orgánica de Protección Jurídica del Menor (LOPJM) de 1996, reclamando de los padres y tutores y de los poderes públicos velar porque la información que reciban los menores sea veraz. Como padre responsable y respetuoso con la libertad y con una moderna forma de pensar  de mis hijos, no permitiría que éstos fueran adoctrinados en el “creacionismo” u obligados a aceptar como hecho histórico el mito de Adán y Eva...

   Otra de las falsas razones aducidas para tumbar la LOMLOE es que lo que pretende este Gobierno “comunista-bolivariano”, yo añadiría “herodiano”, no es más que cerrar los centros de educación especial para los alumnos que los requieran. Nada más lejos de la verdad. Estos centros jamás desaparecerán, como no desaparecerán otros centros clínicos. Lo que establece la ley Celaá es que en un intervalo de diez años los centros educativos públicos se irán adaptando para poder ofrecer a los chavales discapacitados una educación integral con los demás alumnos, sin tener necesidad de acudir a un centro especializado. Con ello la nueva  ley no hace más que seguir las indicaciones de instituciones internacionales y las exigencias de muchos padres. Dice textualmente la ley: El Gobierno, en colaboración con las Administraciones educativas, desarrollará un plan para que, en el plazo de diez años, de acuerdo con el art. 24.2 e de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas, y en cumplimiento del cuarto Objetivo de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, los centros ordinarios cuenten con los recursos necesarios para poder atender en las mejores condiciones al alumnado con discapacidad...

   Y así podríamos seguir...

   Sólo sugerir la lectura de los artículos, Los padres no mandan en una educación libre y democrática, de Javier Mestre en público.es de 23-11-20, el de Esther Palomeras, Miente, que algo queda, en elDiario.es de la misma fecha.

 

 

   Manuel Vega Marín. Madrid, 25, Nov. De 2020   www.solicitoopinar.blogspot.com.es

 

miércoles, 18 de noviembre de 2020

LA MEJOR HERRAMIENTA CONTRA LA DESINFORMACIÓN ES LA VERDAD

   Son tantos los elementos que las “nuevas tecnologías” ponen a disposición de los Medios de Comunicación y Difusión, que aún el ciudadano más interesado en informarse verazmente, se ve desbordado individualmente para poder contrastar el exceso de información disponible. Pero el problema que se plantea no es precisamente la cantidad, sino la calidad de la información. A medida que los saberes se han ido ampliando y diversificando, sus receptores han tenido que ir reduciendo  su capacidad de comprehensión e ir multiplicando las especializaciones. Muy difícilmente encontraríamos hoy un Aristóteles o un Tomás de Aquino que peroraran de ómnibus rebus. He de suponer también que siempre habrá habido quién haya especulado con la información por intereses espurios. Pero también es cierto que, a medida que la sociedad se ha ido haciendo más permisiva y menos dogmática y autoritaria, los abusadores de la “libertad de expresión” se han ido  multiplicando vertiginosamente... Por ello el ciudadano de a pié necesita de una institución especial e imparcial que le filtre y le pula de escoria cualquier información que le interese. No un “ministerio de la verdad”, como los partidos de la oposición y sus “adictos medios”, hipócritamente escandalizados, se han precipitado en llamar, como un pretexto más en el acoso y derribo del progresista Gobierno de coalición.

   Digo hipócritamente, porque es vergonzante que el PP, casi sin leer la O.Ministerial  del BOE de 5 de noviembre, aproveche el apoyo de HB Bildu a los Presupuestos del Gobierno, para adoctrinar a sus barones a que difundan una supuesta vinculación de las fuerzas de izquierda con la banda ETA, o como un alegato para incumplir con la Constitución en lo referente a la renovación de Consejo Superior del Poder Judicial. Bien harían los dirigentes del PP en consultar la hemeroteca y comprobar la negociación permanente que sus máximos líderes han tenido con lo que Aznar llamaba el Batallón Vasco Español de liberación... Recordar a ETA cuando dejó de matar hace diez años,  y desaparecida hace tres, evidencia una falta de argumentos veraces, la mejor exaltación del terrorismo y, sobre todo, una rememoración permanente e interesado del dolor de las víctimas...

   Una vez más habrá que recordarles a estos constitucionalistas de boquilla, lo que el artículo 20 CE (Libertad de expresión) dice en su apdo.1,d: se reconocen y protegen los derechos a comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión. Y lo contrario de información veraz es DESINFORMACIÓN. La RAE la define como acción y efecto de desinformar. Y por DESINFORMAR, dar información intencionadamente manipulada al servicio de ciertos fines, o (2), dar información insuficiente y omitirla. ¿Y qué es lo que hace Casado en su prédica antes mencionada u otros poderes fácticos de su cuerda? DE-SIN-FOR-MAR...

   Pero es que, además, el Presidente del PP, que sólo acude a Europa para desprestigiar al Gobierno de España, pero se pasa por el forro otras “directivas”, parece no conformarse con la respuesta de la Comisión Europea, avalando el plan del Gobierno contra la desinformación. Pablo Casado y sus eurodiputados tienen menos interés en criticar el chantaje de sus correligionarios gobiernos de Hungría y Polonia sobre el fondo europeo aticrisis, que  en afirmar el Estado de Derecho en España  Toda la polvareda seudopolítica levantada por  la aprobación del Consejo de Seguridad Nacional, y que ha provocado a determinada oposición y a ciertas asociaciones profesionales, a malinformar de que lo que pretende el Gobierno es censurar la libertad de expresión, se ha quedado, pues, en “aguas de borraja”. Por demás, el plan europeo contra la desinformación es del año 2018, reactivado actualmente por la cantidad de bulos que pululan por las redes respecto del COVID-19, que tanto daño puede causar a una población incauta o mal informada. Según el portavoz europeo, la lucha contra la desinformación  es importante en las actuales circunstancias de pandemia, que ha conllevado un dramático aumento de información falsa y engañosa. En la lucha contra la desinformación, los ciudadanos consideran que los medios de comunicación, las autoridades públicas y las plataformas de medios sociales son los principales responsables de frenar la divulgación de noticias falsas. (Del anejo a la O.M.).

   Está bien que, ante el enorme cúmulo de información variada, dificilísimo de procesar individualmente, las instituciones representativas de los ciudadanos, cumpliendo con el mandato constitucional de que éstos reciban una información veraz, creen los idóneos mecanismos, democráticamente controlados, en evitación de la gran cantidad de bulos y mentiras con que las computadoras pueden aturdir y dejar indefenso a los ciudadanos... Es tradicional en la derecha política y caciquil mantener al pueblo en la incultura...

   Es acceso a información veraz y diversa –dice el Anejo de la O.Ministerial- es uno de los pilares que sustentan a las sociedades democráticas y que deben asegurar las instituciones y administraciones públicas, porque se conforma como el instrumento que permite a los ciudadanos formarse una opinión sobre los distintos asuntos políticos y sociales. Además, la información permite a la ciudadanía adquirir conciencia y fundamento para participar en los debates públicos, y, entre otros derechos democráticos, en los procesos electorales. Por este motivo, la libertad de expresión y el derecho a la información se consagran como derechos fundamentales en nuestra Constitución. Sin embargo, estos procesos de participación democrática se ven cada vez más amenazados por la difusión deliberada, a gran escala y sistemática de desinformación, que persiguen influir en la sociedad con fines interesados y espurios.

   Más que criticar a la ligera o llevados por esos interese espurios, la obligación de todos los grupos políticos y económicos-sociales, cualquiera que sea su color, es participar y vigilar que esos buenos objetivos se cumplan, porque  ¡lo único que nos hace libres es la Verdad!...

 

   P.D. Me gustaría sugerir la lectura de dos escritos publicados en elDiario.es: Casado evita criticar el chantaje de Hungría y Polonia sobre el fondo europeo mientras cuestiona el Estado de Derecho en España, de Andrés Gil/Íñigo Aduriz y Lo que todavía enaltece a ETA, de Isaac Rosa (Ambos de 17-XI-20).

 

 

   Manuel Vega Marín. Madrid, 18, Nov. 2020    www.solicitoopinar.blogspot.com.es

 

 

 

 

viernes, 13 de noviembre de 2020

SIN RECICLAR RESIDUOS, LAS FUENTES DE LAS NUEVAS ENERGÍAS SE AGOTARÁN

   Las nuevas tecnologías serán “pan para hoy, hambre para mañana”, si los humanos seguimos administrando los recursos que la Naturaleza y nuestro Planeta nos proporcionan como si fuesen ilimitados. Y, por tanto, si no reciclamos suficientemente los residuos o no “ponemos en barbecho” sus veneros, sus generosos ciclos productivos, cada vez se irán acortando más.

   El animal humano, haciendo de su sustento vital un negocio de beneficio cortoplacista, y del consumo de bienes un lucro salvaje, se convierte en un carroñero mucho más compulsivo que otros animales depredadores, cuyo instinto no les impele a “almacenar” más de lo estrictamente necesario para su propia conservación y la de otros frutos de la Naturaleza.

   Hace tiempo que los científicos y el deterioro evidente del Planeta nos vienen advirtiendo del peligro que supone el sistema salvaje de explotación extractiva y abuso consumista, causante, por ejemplo, del cambio climático o del permanente lanzamiento a la atmósfera de gases contaminantes...

   Ese progresivo deterioro de nuestro entorno, observable a ojos vista, y, quizá, el COVID-19, han obligado a muchos ciudadanos, instituciones y gobiernos a reaccionar, aunque sólo sea para frenar y poder seguir con igual ritmo de vida. Lo antieconómico, por escasa y dañina, que ha devenido la extracción de materias primas como el carbón o el petróleo, así como su consumo, ha hecho saltar las alarmas de la contaminación atmosférica. Los ciudadanos que viven y trabajan en grandes aglomeraciones urbanas, aunque tarde, han caído en la cuenta de lo perjudicial que resulta el uso excesivo del automóvil privado. Ello les ha hecho clamar por un cambio de las tradicionales fuentes de energía, el carbón y el petróleo, que han alimentado su fabricación y funcionamiento. Se piensa, entonces, en las “energías alternativas”, pero no para abandonar el uso irracional del automóvil, p. ej., sino por ahorro económico.  Sin embargo, poco pensamos en la cantidad de “aparatitos”, cuyo uso se ha convertido en imprescindible en nuestra vida diaria y familiar.

   La gran mayoría de los ciudadanos piensa en las tecnologías eólicas o solares como si fuesen éstas las únicas existentes, porque piensan sólo en el automóvil y en el ahorro en la factura de la luz, como si la transformación y sustitución de ambas fuesen gratis y no generaran residuos. Pero basta reflexionar un poco para darse cuenta, no ya del coste de los aparatos de sustitución, sino de la enorme cantidad de metales “raros”, que, además de los “habituales”,  serán necesarios para el funcionamiento de estos nuevos “aparatos”: baterías, posters donde cargarlas, placas solares, etc...

   Muchos de los que podemos disfrutar de un simple teléfono móvil o un ordenador no somos conscientes de los inmensos daños que la extracción de los minerales “raros”, con los que funcionan, está causando en las personas que trabajan en las minas, la desforestación de terrenos y todas las consecuencias que ello tendrá en el futuro... La posesión, búsqueda o comercialización de este “nuevo oro”, ¿provocará guerras que hagan cambiar las relaciones globales actuales? Seguramente. ¿Se conformará EE.UU. con que la gran superficie de China contenga el 97% de minerales  raros del mundo? No obstante, China ya es una gran potencia; pero ¿qué volverá a suceder en Bolivia, pequeño país riquísimo en Lítio? ¿Volverá el gigante americano a intentar desestabilizarlo, como lo sigue haciendo con Venezuela para arrebatarle las últimas reservas petrolíferas?  ¿...?

   Cuando pensamos en las nuevas fuentes de energía, en contraposición a los combustibles fósiles, las que primero nos vienen a la cabeza son  las derivadas de la radiación solar y la eólica. Y es que cada vez más, cuando viajamos, vemos en el horizonte enormes molinos que harían enanos a aquellos otros que Don Quijote consideraba gigantes. Muchas veces la carretera atraviesa enormes superficies, antes extensos trigales, que nos parece navegar un océano, pues tal es la cantidad de placas solares, cuyo brillo llega a deslumbrarnos.

    Cualquier producto de la Naturaleza nos es ofrecido gratis independientemente de su abundancia o escasez en las zonas donde yacen. Su valor de uso  se lo confiere su propia utilidad  interna en la satisfacción de necesidades humanas. Pero, cuando la industria humana los convierte en mercancías idóneas para la especulación, no para el bienestar y progreso de todos, entonces, estamos hablando de otra cosa.  ¿...?

   Ciertamente, independiente de su abundancia o escasez y de su oportuna conversión  en un producto aprovechable, el solo hecho de adaptarlo a las necesidades humanas ya supone un coste. El calor solar, el agua o el aire, que parece dársenos gratis, supone un gasto mínimo de almacenaje. Y, en la medida que su abundancia disminuye o su extracción y reconversión en elementos necesarios aumenta en dificultad, también aumenta, casi nunca equilibrada y proporcionalmente, el “precio” en el mercado. Las guerras que ha provocado la posesión de los combustibles fósiles parecen hacernos olvidar su gratuidad original. Sin embargo, desde el descubrimiento del yacimiento del mineral, hasta su distribución en las gasolineras, va todo un largo proceso de inversión de recursos humanos y económicos casi infinito. Y no me refiero tanto a los costes monetarios, cuanto a las nefastas consecuencias que el uso abusivo de cualquier producto puede suponer para la Humanidad y el Planeta. Basta con poner como ejemplos la contaminación atmosférica o el calentamiento global...

       Lo mismo ocurre con las nuevas fuentes de energías más frecuentes. Desde que nos llega un rayo del sol o se mueve una “mijita” de viento, hasta que nos duchamos en destino después del viaje entre gigantes y mares, existe todo un enorme proceso de inversión. Ese ínterin es el que deseo hacer objeto de mi reflexión; porque todo en la vida tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Y elegir entre ambas opciones siempre supone renuncias. A veces, lo sensato consiste en quedarse con lo bueno renunciando a lo óptimo. Continuamente la industria nos tienta con  nuevos “aparatos” que a muchos aumentaría aún más su bienestar. Muchas veces nos quejamos de la llamada “obsolescencia programada”, pero, si el consumidor fuera menos ávido de cambiar elementos aún en buen uso, mirara sin envidia al vecino o fuera más solidario con los que carecen de los bienes más básicos, la propia industria dejaría de fabricar para el corto plazo.

   El ritmo de fabricación y consumo de los países más avanzados económicamente, y la atroz competencia que obliga al sistema capitalista a ampliar cotas de mercado, se convierte en una espiral sinfín, que, difícilmente, facilitará que la Naturaleza tenga tiempo de recuperarse de los desgastes que el hombre le ocasiona, o que la industria del reciclaje pueda transformar los desperdicios diarios, que, en grandes cantidades desechamos...

   Muchos bienpensantes, objetarán que, sin este ritmo de fabricación y consumo, no se crearían nuevos puestos de trabajo o se destruirían muchos de los ya existentes. Estas y otras ideas semejantes son empleadas demagógicamente para justificar un sistema, cuyo crecimiento salvaje en busca de los máximos beneficios, no tiene en cuenta la solidaridad, ni la desigualdad social, ni una justa distribución de la riqueza,  ni la explotación de menores, etc.., ni, mucho menos, el deterioro progresivo de nuestro Planeta Azul. Mucha tela que cortar que dejaremos para otro artículo... De momento, este lo doy por finalizado...

 

 

 

   Manuel Vega Marín. Madrid, 12, Nov. 2020    www.solicitoopinar.blogspot.com.es

 

       

martes, 10 de noviembre de 2020

LA CONSTITUCIÓN ATRIBUYE AL ESTADO LA COMPETENCIA EN LA ENSEÑANZA

       Educar e instruir a sus hijos son, entre otros,  un derecho y un deber que corresponde a los padres primeramente.  Así son reconocidos tanto por la Constitución de la República en el art. 43.2, como la vigente de 1978 en su art. 29, dedicados ambos a la protección de la familia. La republicana, sin embargo, es más contundente y clara en la redacción de la norma. Así, en su artículo 48, dice: El servicio de la cultura es atribución esencial del Estado, y lo prestará mediante instituciones educativas enlazadas por el sistema de la escuela unificada. Y aunque la enseñanza será laica, no obstante, se reconoce a las iglesias el derecho, sujeto a la inspección del Estado, de enseñar sus respectivas doctrinas en sus propios establecimientos...

   Ese mismo derecho está reconocido en el apartado 5 del art. 27 en la Constitución de 1978: Los poderes públicos garantizan el derecho de todos a la educación, mediante una programación general de la enseñanza, con participación efectiva de todos los sectores afectados y la creación de centro docentes.

   Hasta diez apartados tiene el artículo 27 de la de 1978 dedicado a este asunto. Esta proliferación de apartados y sus repetitivas contradicciones, denotan la cantidad de intereses, a veces enfrentados, que tuvieron que “lidiar” los constituyentes y redactores del mismo. Ello lo confirma, además, la cantidad de leyes orgánicas - creo recordar siete-  que han regulado el sistema educativo, desde la LGE de 1970 (Franco-UCD) a la LOMCE de 2013 (ley Wert). Aún en estos días se está dictaminando en el Parlamento otra, la LOMLOE de la ministra Celaá, que sustituirá a la del ministro Wert.

   Lo que realmente está en peligro en esa lucha entre el Estado y los Centros privados Concertados, principalmente propiedad de la iglesia Católica, es la pérdida de esa competencia estatal y su traspaso a los Centros concertados, es decir, a la iglesia Católica. En definitiva, lo que está en juego es el Principio de subsidiaridad, que, además de competencia, indica el nivel  jerárquico habilitado para actuar en lugar de otro. Ese principio tiene su origen en la Doctrina Social de la Iglesia, que lo introdujo, precisamente, en un intento de rebajar y reducir el papel del Estado a una función de sustituto de lo que no puede conseguir la sociedad civil. La propia RAE de la lengua en una de sus acepciones lo define como el criterio que pretende reducir la acción del Estado a lo que la sociedad civil no puede alcanzar por sí misma. Evidentemente no defendemos una acción estatal en todos los órdenes de la vida. Reconocemos la iniciativa privada de la sociedad civil y sus instituciones a reclamar del Estado, en pro del “bien común”, ayuda para alcanzar objetivos que no contravengan intereses comunitarios. Pero estamos en contra de que determinadas asociaciones civiles, mucho menos religiosas, arrebaten al Estado su “competencia jerárquica” en este tema crucial de la educación. Es justo lo que vienen haciendo las sentencias de los Tribunales de Justicia en una perversa interpretación de la LODE de 1985, reguladora de los conciertos y el apartado 3 del art. 27 CE, que establece el derecho de los padres a elegir la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones. No se puede poner por encima el “dudoso” derecho a la formación religiosa al derecho constitucional de igualdad de oportunidades, basado en los Derechos Humanos, que una enseñanza igualitaria confiere. Con el pretexto de la libertad religiosa y la pretensión de la iglesia católica de seguir adoctrinando con la asignatura de Religión en los centros escolares, se ha ido “colando” la intención de recuperar el poder que la iglesia tuvo en el franquismo.

   Debemos recordar que fue el primer Gobierno del Psoe, en la LODE de 1985, quien deseando universalizar la enseñanza básica, tuvo que recurrir, pensábamos que provisionalmente, al sistema de conciertos con los centros privados de enseñanza, la mayoría propiedad de la iglesia Católica, a la sazón casi monopolizadora de la educación por delegación de la dictadura. Lo provisional, no sólo ha devenido definitivo, sino que, además, la enseñanza privada concertada, crece en detrimento de la pública, convirtiéndose en un negocio para sus dueños. Con esta estrategia jurídica la iglesia piensa compensar con la catequesis en la enseñanza lo que va perdiendo con el avance en el proceso de secularización, que se va produciendo en la sociedad civil...

   Hay que recordar también que extender y universalizar la enseñanza básica y gratuita es un mandato constitucional. Pero, dada la carencia por parte del Estado de presupuesto e instalaciones para poder cumplirlo, éste, provisional y transitoriamente, se vio obligado a recurrir al sistema de conciertos recogido en la LODE de 1985, mientras aquella situación deficitaria fuera superada. Pero por causas, que rebasan este trabajo, la subsidiaridad temporal en la financiación por el Estado de centros educativos privados, corre peligro de convertirse en definitiva.

   Por todo ello, nos ha llamado la atención las sentencias del Tribunal Supremo del 14 de octubre,  tumbando la decisión de la Generalitat Valenciana de no renovar el concierto a dos colegios católicos de élite, Ntra. Sra. del Pilar y los Hnos. de La Salle, que recurrieron la medida de la autoridad autonómica valenciana. El magistrado ponente de dicha sentencia ha sido José Luis Requero Ibánez, acérrimo defensor de la enseñanza concertada, y declarado miembro del Opus Dei, institución católica en la que militan un tercio de los jueces. Los fallos de la Sala de lo Contencioso del Supremo contra la Comunidad Valenciana suponen todo un blindaje al régimen de conciertos, ya que aquéllos se producen a pesar de tratarse de unidades educativas no obligatorias o de que éstas puedan ser cubiertas por la red de centros públicos. Blindando de por siempre los conciertos, si la natalidad sigue bajando, fácilmente se puede llegar al absurdo de invertir recursos públicos en unidades educativas privadas, cuando las plazas en  centros públicos son suficiente o inexistentes. Sentencias así suponen un paso más en la ampliación de la financiación estatal de entidades privadas a costa de la progresiva disminución de centros públicos, pareciendo éstos prestar un servicio subsidiario de aquéllas.

   Me temo que mientras subsista el Concordato franquista de 1953, aggiornado por los Acuerdos concordatarios de 1979 con el Vaticano, las cosas van a seguir igual por muchos “dimes y diretes” disfrazados de litigios jurídicos, o por muchas nuevas normas legales que  dictamine el Parlamento, si éstas no se cumplen después... Porque, a pesar de los Gobiernos de centro-izquierda y sus leyes, más o menos, “progresistas”, hemos llegado al momento en el que estamos…..

   La nueva ley, LOMLOE, del Gobierno de coalición, en trámite parlamentario, no parece conformar del todo a los que propugnan una enseñanza pública, laica y de calidad. A pesar de las enmiendas de UP y otros grupos parlamentarios al texto del Psoe, como la referente a la inmersión lingüística, la prohibición de concertar con los centros que segreguen por sexo, la prohibición ceder suelo público a entidades privadas, el compromiso de ofertar más plazas públicas, incrementar los recursos, etc., etc., estos sectores creen que la reforma educativa en trámite, no son más que guiños y una vuelta a la LOE de 2006, con los que se intenta potenciar sobre el papel la enseñanza pública. Pero que, en la práctica, todo quedará igual, o peor si prosperan algunas enmiendas de grupos conservadores y nacionalistas...

   Para terminar, lo haré reseñando y respaldando las dos propuestas básicas reivindicadas por diferentes grupos sociales y políticos, y entregadas a la Comisión de Educación del Congreso en febrero de 2018, que propulsó una Proposición no de ley que instaba al Gobierno a:

   1.- Garantizar el imprescindible carácter laico que debe revestir la Escuela como institución pública, dejando la religión confesional fuera del sistema educativo oficial, es decir, del currículo y del ámbito escolar.

   2.- Denunciar y derogar los Acuerdos del Estado español con la Santa Sede, así como los suscritos en el mismo sentido con otras confesiones religiosas, obligando al gobierno a proceder para el cumplimiento de ese mandato.

 

   P. D. : Sugiero al lector la lectura del artículo Bendición judicial para la expansión de la concertada: la Iglesia logra el blindaje del dinero público para sus colegios, publicado por A. Munárriz en infolibre.es de 26-10-20, y el artículo La reforma educativa (LOMLOE), en la habitual senda confesional, de F. Delgado Ruíz y otros, en público.es de 28-10-20.

 

 

   Manuel Vega Marín. Madrid, 7, Nov. 2020     www.solicitoopinar.blogspot.com.es

 

ASOCIACIONES DE CATÓLICOS LGTBI ILUSIONADOS CON LAS PALABRAS DEL PAPA

    En el periódico digital infolibre de hoy, 1-11-20, Ángel Munárriz en una larga columna expone lo que puede considerarse también un largo listado de frustraciones de estos ciudadanos “ilusos”, confiados más en las opiniones personales de algún jerarca, que en lo que establece la dogmática oficial de la Iglesia Católica. Se refiere,  Munárriz a unas declaraciones que hizo el actual Papa Francisco, siendo arzobispo de Buenos Aires, a favor de dar cobertura legal a las relaciones entre personas homosexuales, y publicadas recientemente.

   En octubre de 2016 escribí, creo que a raíz de unas declaraciones del cardenal Blázquez, entonces Presidente de la Conferencia Episcopal española, un artículo titulado A la Jerarquía católica le sigue obsesionando el sexo (solicitoopinar.blogspot.com.es). Hoy, al iniciar este trabajo, he dudado en titularlo “Los homosexuales católicos siguen obsesionados con la obsesión de la Iglesia Católica”... Y es que, respetando, por supuesto, su buena fe y sus creencias religiosas, no alcanzo a entender tal obstinación en una religión que niega a estas personas su propia constitución natural. Ello en base a unos prejuicios, más que principios, sin justificación evidente en los Evangelios, y, mucho menos, en la Antropología científica. Me pregunto si la institución católica, en su afán de estar presente en todos los sectores sociales y vitales, no los utiliza de pantalla, de la misma manera que presume, cuando le interesa, de otros cristianos de base comprometidos.

   No puedo comprender, si no es por debilidad o por neurosis masoquista, que se acepte sin recompensa cierta, convertir esta vida en un “valle de lágrimas”, reprimiendo el legítimo placer sexual, y, encima, amenazado de condena eterna, si pecas practicándolo. Sólo ello es posible viviendo en un permanente e insano desdoble de personalidad, por causa de que unos jerarcas hipócritas consideren que los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados sin base científica alguna. Sin embargo, y quizá por la represión “teórica” de la sexualidad, es la institución donde más se practica, no ya  las relaciones homosexuales,  sino algo peor como es la pederastia...  Creo que era el Papa Ratzinger quien decía, cito de memoria, que la actividad homosexual impide la propia realización y felicidad porque es contraria a la sabiduría creadora de Dios... Estas palabras me sugieren algunas preguntas: ¿por qué lo sabe y cómo está tan seguro de ello? ¿No sería más lógico pensar en el fracaso de Dios creador si aceptamos que un tercio de la Humanidad no pertenece a ninguno de los dos géneros tenidos por naturales?...

   Está bastante estudiado por el Psicoanálisis que los hombres no sólo actuamos en pro de objetivos factuales presentes o futuros, sino que una gran parte de nuestra conducta nos viene motivada desde otras instancias, bien subjetivas o trascendentales. En la vida del hombre subsisten verdades –decía en mi escrito citado anteriormente- que sin ser verificadas experimentalmente, como las creencias, ejercen mayor influjo en su comportamiento particular, que otras más contrastadas empíricamente. Decía Freud que, muchas veces, la significatividad pesa más que la objetividad...

   No pretendo en este momento hacer una crítica a la Religión. Sí criticar a los que pretenden usarla como si ésta fuera una especie de psicoanálisis colectivo inútil, cuando, cual neurótico, se intenta vivir conscientemente de espaldas al principio de realidad. Y vivir con la expectativa ilusionante de la opinión privada, aunque sea de un Papa, incapaz él mismo de contravenir el dogma y la doctrina oficial sustentada en una larga tradición, es como “vivir en Babia”...  

   Mucho menos pretendo privar a los participantes o militantes de una asociación, ONG o partido político de su derecho y deber a procurar mejorar y adaptar sus estructuras internas y  su actividad externa a los cambios socioculturales, que, en cada momento, los ciudadanos demandan con el propósito de ajustarlas a una óptima solución de sus problemas. No existe obra humana que no sea perfectible, aún teniendo que modificar principios o normas no dependientes de los avatares cotidianos. En este caso,  como la filiación es libre, lo mejor que puede hace un militante al llegar a esa situación es darse de baja antes que dañarse a sí mismo, perjudicar  a la propia asociación y a los compañeros que siguen participando...

   Cuando hablamos de una religión concreta, como la Católica, que, aunque sus miembros son humanos, y desarrolla su actividad entre ellos, lo hacemos de una agrupación regida por principios y axiomas revelados por un Dios trascendente, cuyo objetivo es alcanzar la “otra” vida, sólo si sus feligreses conforman su vivir terrenal a esas “verdades” reveladas, muchas de ellas estereotipadas  en dogmas, interpretables sólo por la autoridad eclesial, dejando muy poco margen a sus fieles para mejorar su situación terrenal. Existe un dicho, no desmentido oficialmente, que asevera que fuera de la Iglesia no hay salvación... Por si fuera poco, aunque escasamente utilizado, el Sumo Pontífice, entre sus atributos, goza del dogma de la “infalibilidad” ex cathedra. Hubo un tiempo de poderío monopolístico en el que la Iglesia no dudó en proferir “anatemas” contra el saber científico, o de declarar “herejes” o quemarlos en la hoguera a quienes no “comulgaban con ruedas de molino”...

   Por suerte, esos tiempos tenebrosos ya pasaron. Incluso, de vez en cuando, los cardenales, reunidos en cónclave “secreto”, pero presionados por diferentes intereses políticos, territoriales, económicos, etc., eligen a su máximo dirigente más conveniente... Pero, a veces, “la paloma” les contradice y les confunde de tal manera, que, como ocurriera con Juan XXIII o el actual Francisco, elegidos como “de transición”, sorprenden, bien convocando un Concilio, bien escribiendo Encíclicas o pronunciando declaraciones, merecedoras de ser tachadas por la “caverna” o los medios más retrógrados de peronistas o comunistas... Algunos fidelísimos, ni eso; aluden a su Papa por “ciudadano Bergoglio”...  Y es que  a los poderes fácticos no hay Espíritu Santo, por mucho que se disfrace de pájaro, que pueda contradecirles. Así que, después de la “borrasca”, quizá provocada, para continuar ilusionando a muchos fieles incautos, viene la calma... ¡Todo seguirá igual!...

   No obstante, considerándome agnóstico, como mínimo, sigo considerando, tanto a la Religión, como al Mito, fenómenos provisionalmente eternos, necesarios psicológicamente, a unos más que otros, para el desarrollo del hombre y de la civilización. Pero creo también que se puede vivir una vida con pleno sentido, sin tener que gastar energías psíquicas en una religión concreta, muchas de cuyas “verdades dogmáticas” son imposibles de cumplir... Así que, humildemente, sugiero a los católicos LGTBI que gasten sus energías psíquicas en otras luchas....

 

  Manuel Vega Marín. Madrid, 2, Nov., 2020   www.solicitoopinar.blogspot.com.es