jueves, 9 de marzo de 2017

LOS GURÚS DEL PERIODISMO TAMBIÉN CAEN, O SE DEJAN CAER, EN LA TRAMPA



   Se puede pensar, yo al menos, que el “comunicado” de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) contra PODEMOS, es un ataque más, esta vez precocinado y preparado de antemano. Y lo considero así por varias razones: una, por lo inesperado del mismo sin que hubiera algún hecho previo que lo justificara; dos, tal comunicado es una acusación en toda regla sin que los ofendidos o acosados den la cara, y presenten las pruebas exigibles por cualquier Juzgado; tres, porque la APM no es un Tribunal de Amparo, ni un Sindicato o Colegio Profesional de colegiación obligatoria, que tuvieran que salir en defensa de sus afiliados. Más bien es un lobby  de presión manipulado por las grandes empresas de la información, como si fuera poca la distorsión informativa e ideológica, que pretenden imponer desde los consejos de administración de las mismas. Y cuarta, la rapidez con que el resto de partidos han acudido al “toque de arrebato” lanzado desde esta entidad privada.